- garantizar la seguridad en el transporte: asegurar que los materiales, productos lleguen a su destino sin riesgos, cumpliendo con las normas de tránsito y protocolos de seguridad.
- optimizar la logística de la empresa: mejorar los tiempos de entrega y recolección para aumentar la eficiencia operativa.
- proteger los activos de la empresa: mantener los vehículos asignados en óptimas condiciones, asegurando su buen uso y cuidado.
- cumplir con las rutas asignadas eficientemente: minimizar costos operativos y maximizar la productividad a través de un manejo eficiente de rutas.
- mantener un flujo continuo de materiales: transportar insumos como tintas, textiles y herramientas entre proveedores, talleres y almacenes según las necesidades de producción.
- normas de tránsito y seguridad vial: familiaridad con las leyes de tránsito y regulaciones locales, así como con las mejores prácticas de conducción segura.
- mantenimiento básico del vehículo: conocimiento de revisión de niveles de aceite, presión de llantas, sistema de frenos y detección de fallas comunes.
- rutas y geografía local: conocimiento de las principales calles, avenidas, zonas industriales y rutas alternas para evitar tráfico.
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